A principios de este mes de octubre, se inició la campaña de recolección de almendras en nuestras parcelas. Una vez se finalizó la campaña, se procedió a pelar toda la cosecha, para posteriormente, dejarlas reposar unas semanas para su secado antes de ensacarlas.

Tras disponerlas en sacos se ha procedido esta semana a su pesaje. El resultado no ha sido el deseado, no ha sido bueno. En total se han recogido 385 kgs., de los cuales 288Kgs son de la variedad Desmayo (Largueta) y los 97 Kgs. restantes de la variedad Marcona.

Recordamos que nos habíamos fijado un objetivo de al menos 500 kgs. Por lo tanto, no se va alcanzar la previsión. Una vez más el clima nos ha vuelto a jugar una mala pasada, ya que la fuerte tormenta de piedra de julio afectó a gran parte de las almendras que no cayeron del árbol. De los 385 kgs. recogidos una buena parte estará afectado por la tormenta de piedra. Esto significa que, en ese momento, el impacto paró el crecimiento del grano. En consecuencia, al partir la almendra, en muchos casos, nos encontraremos con una lámina.

Esta situación hará que el rendimiento de la cosecha sea excesivamente bajo. Por consiguiente, no es aconsejable su venta a mayoristas. A partir de ahora, la Junta de Gobierno de la Asociación AGRICOLARIS, buscará soluciones alternativas para obtener el máximo provecho económico del producto para minimizar el posible impacto sobre los presupuestos aprobados en la parte de ingresos.